Sonia Ibáñez, tenía 46 años, era maestra jardinera en la ciudad de Fernández, Santiago del Estero, y fue asesinada por su expareja quien tenía varias denuncias por violencia de género.
El hecho fue descubierto por su hijo, en la madrugada de este sábado cuando encontró a su padre en las afueras de la vivienda con un cuchillo en su mano.
Según informaron fuentes policiales, en la relación ya habían antecedentes de violencia y ella lo denunció en reiteradas oportunidades.
Tal es así que Sonia contaba con el botón antipánico en su teléfono celular para que lo utilice en caso de que su ex pareja la agreda nuevamente.
El hombre, luego de cometer el femicidio, intentó suicidarse y dejó una carta de despedida. Sin embargo, no logró cometer el suicidio y se encuentra internado con custodia policial.
Amigos y familiares de Sonia están consternados por este terrible hecho y piden justicia a través de las redes sociales.